El ritual del dragón contra el frío

El dragón (del latín draco, y éste del griegodrakon o draqhon, "víbora" o "serpiente") es un animal mitológico que aparece en diversas formas en varias culturas en todo el mundo, con diferentes simbolismos asociados. En cada civilización la figura del dragón juega un papel importante como dios, guardián, y en algunos casos como demonio, pero todos estos sentidos mitológicos están de acuerdo en que se trata de un ser poderoso y respetable, en algunas civilizaciones es reconocido también por poseer gran sabiduría. Los dragones a menudo pasan por tener un significado espiritual mayor en varias religiones y culturas del mundo.

El que tanto culturas occidentales como orientales haya imaginado reptiles gigantes y alados se puede atribuir al contacto con gaviales, cocodrilos y caimanes; al hallazgo de fósiles de dinosaurios mezclados con otros de animales voladores como pteranodontes y a la asociación de lagartos y reptiles con la sexualidad masculina.

Existe un ritual pagano contra el frío encontrado en las diversas civilizaciones donde se han encontrado dragones mitológicos, que fue luego adaptado a la wicca por diversos autores contemporáneos.

Consiste en quemar piedras de incienso y dibujar la silueta de un dragón, o visualizarla, mientras imaginamos que el calor comienza a recorrernos empezando por las palmas de las manos, que, dentro del círculo mágico, tendremos orientadas hacia el punto de los atalayas del Fuego.